¿Alguna vez ha contado las marcas que consume o que tiene al alcance de la mano en un día? Solo este simple análisis nos hace recordar que el marketing es una de las gestiones más importantes del mundo. Desde que nos levantamos consumimos por lo menos 5 marcas, contando el despertador hasta la pasta de dientes y el champú. Por eso en este artículo trataremos la importancia de gestionar las marcas de forma que los consumidores sean tan leales que no quieran cambiarlas.
Empecemos por analizar, ¿qué le motiva a un cliente a consumir una marca? Hay muchas razones entre ellas que se encuentre en el lugar en donde frecuentemente hacemos las compras, el precio, la imagen o simplemente por costumbre. Pero esto va más allá según la gente del marketing.
Una buena gestión del branding ocupa toda una estrategia, desde la misión, visión y objetivos de la marca, que acompañada por un buen presupuesto se puede volver la preferida.
Cualquier acción de comunicación que lleve a cabo la empresa para fortalecer la marca, se convierte en una oportunidad para hacer tangible y reforzar la promesa de marca, dar credibilidad a la comunicación y en definitiva construir una marca sólida y con personalidad que radique en la diferencia.
Hoy los consumidores son más exigentes y tener al alcance la tecnología, hace que se vuelvan consumidores más analíticos y comparativos, es por eso que los profesionales del marketing tiene la tarea de convertir las marcas en experiencias inolvidables que sean procesos con diferentes activos que las hacen identificable.
Existen muchas marcas que han logrado que su imagen y medio ambiente sea tan memorables que no importa cual de sus atributos se muestre, son indispensables para el consumo, entre estas podemos mencionar:
- Coca Cola
- McDonald´s
- Kisses de Hershey´s
- Pollo Campero
- Bic
- Crayola
- Pizza Domino´s
- Gillette
- Kellogg´s
- Dos Pinos, entre otras
Lo importante de todo esto es que quien esté a cargo de la gestión del branding en una empresa, realice todos los esfuerzos y presupuestos para que ésta sea memorable e inconfundible y que a simple vista el cliente pueda identificarla y preferirla, pero esto solo se logra con el ABC del posicionamiento (Atributos, Beneficios y Coherencia) para generar la satisfacción y recompra en los clientes y futuros clientes.
Una marca se asocia con una categoría de producto y calidad, esta última característica nunca debe cambiar, pues es la que marca la diferencia con las demás y genera la coherencia entre la promesa de marca y venta y lo que el cliente en realidad está sintiendo.
Es así como el marketing mix debe estar muy bien alineados a la gestión del branding para que la inversión que se haga en la comunicación sea satisfactorio tanto para la empresa como para los clientes.
Cierro este artículo con un pensamiento de Guillermo Bilancio, en su libro Marketing el Valor de Provocar: “La pasión y la creatividad van de la mano para romper con la lógica, para recrear un sueño, para hacer realidad la afirmación acerca de por qué la imaginación es lo único que supera al conocimiento”. Esto es lo que ha pasado con las grandes marcas como Apple por ejemplo, que van más allá de sus productos, es simplemente amar la tecnología, saber que el público también evoluciona con sus necesidades, experiencias y siempre espera más.