La Cámara de Industria de Guatemala (CIG) a través de un comunicado dio a conocer el Índice de Actividad Industrial, elaborado por la Central American Business Intelligence (CABI) y presentado por dicha cámara, el cual indica una caída de del -5.7% durante el mes de septiembre y que podría deberse en gran parte al contrabando que afecta al sector sumado a la situación generada por la pandemia.
Redacción Perspectiva
De acuerdo con el estudio, la crisis generada por la pandemia se encuentra en un periodo de recuperación, sin embargo el efecto de los meses de confinamiento han dejado serias secuelas en el sector industrial.
“Estos datos representan la actividad de la industria hasta septiembre, donde ya se empieza a ver una recuperación, hoy tenemos otros indicadores como el crecimiento de ingreso de remesas y el IMAE, que nos confirman que vamos por un buen camino hacia la recuperación económica”, señala Eduardo Girón, presidente de la CIG.
La CIG manifiesta que los efectos de la pandemia han sido sensibles en todos los sectores, sin embargo, 6 de los 14 sectores han presentado resultados positivos hasta el mes de septiembre, como es el caso de la industria de metales y minería, con un 25.2%, que está a la cabeza.
“No debe olvidarse que este es un sector que en los últimos años ha sufrido caídas bruscas derivadas del cierre de la mina El Escobal y fallos de la CC que han afectado al sector”, dice el comunicado de la CIG.
Algunos de los factores qua han mostrado cifras positivas son: la industria química y farmacéutica, con un 18.4%; el plástico, con un 7.2% y salud, con un crecimiento del 5.5%.
De los 8 sectores que aún presentan una caída negativa, se encuentran los hoteles y restaurantes, con un -42.4%, ropa y calzado, con una caída del -15.7%; y las telecomunicaciones tiene una caída de -13.2%. En general estos sectores continúan con una tendencia negativa debido a las restricciones en las cadenas de productividad, y en cuanto al sector turístico se debe a las restricciones para prevenir una nueva ola de contagios de COVID-19.
“Aunque aún encontramos cifras negativas en este informe, no debemos perder de vista que los datos del cierre de año serán mejores. Las recuperaciones están en camino de forma generalizada, por lo que podemos esperar que todos los sectores muestren un crecimiento significativo, aunque existirán sectores como restaurantes, hoteles y turismo que por los mismos cambios de comportamiento del consumidor tardarán un poco más en estabilizarse”, indica Paulo de León, director de CABI.
Además de las restricciones por la pandemia y el efecto que ha tenido en la economía es fundamental considerar el daño ocasionado por el contrabando y el riesgo que representa para la economía nacional.
“De acuerdo con las estimaciones de CABI, durante este año el valor de la mercancía contrabandeada se ubica entre Q31 – Q39 mil millones, afectando a todas las industrias, pero especialmente a bebidas, alimentos, medicina y productos de cuidado personal”, dijo la CIG en un comunicado.
En este sentido, el contrabando representa un factor que daña el desarrollo económico del país y sus efectos podrían reflejarse en todos los estratos de la sociedad guatemalteca.
“El contrabando ha estado afectando seriamente al país, sus efectos van más allá de lo económico, en primer lugar, el consumo de estos productos representa graves problemas de salud para las personas, además, pone en riesgo a aquellos que exponen su vida y la de sus familias al hacerse parte de este tipo de delincuencia”, dijo Javier Zepeda, director ejecutivo de la CIG.
