La competencia automovilística que reúne en Francia a miles de espectadores cada año fue suspendida en junio y se fijó como fecha tentativa el fin de semana del 19 al 20 de septiembre, aunque se prevé que las gradas estén semivacías por primera vez y la venta de entradas depende de cómo evolucione la pandemia en Europa.
Redacción Perspectiva
El Automobile Club de l’Ouest (ACO), organización automovilística más importante de Francia, suspendió la venta de entradas para la nueva fecha de Le Mans, “con la esperanza de que las condiciones mejoren”. Si la pandemia tiene una evolución favorable, se podría reactivar la venta de entradas en Europa.
El presidente de la ACO, Pierre Fillon, señaló en el comunicado oficial:
«Siempre hemos estado a la vanguardia de la innovación tecnológica para mejorar la seguridad y la movilidad sostenible. La responsabilidad es uno de nuestros principios básicos. Por lo tanto, estamos seguros de que nuestros fieles espectadores entenderán nuestra posición y apoyarán la decisión”.
El comunicado también agrega que si bien no se batirá ningún record de asistencia este año, “toda la magia de la carrera seguirá intacta y la experiencia del espectador, en el circuito o desde la distancia, seguirá siendo de categoría mundial”.
