Fiscales federales han obtenido una grabación de audio de una reunión en la que el expresidente Donald Trump reconoce haber retenido un documento clasificado del Pentágono sobre un potencial ataque a Irán. Esta grabación desafía su argumento de haber desclasificado todos los documentos en su poder. Según fuentes cercanas a la investigación, Trump entendió que había retenido material clasificado después de dejar la Casa Blanca. Aunque le gustaría compartir la información, es consciente de que no puede hacerlo en su capacidad posterior a la presidencia para desclasificar documentos.
Redacción Perspectiva
La grabación, descrita por varias fuentes, es considerada una prueba importante en un posible caso contra Trump. Los fiscales han consultado a testigos sobre la grabación y el documento en cuestión. El fiscal especial a cargo de la investigación criminal sobre el manejo de secretos de seguridad nacional por parte de Trump, Jack Smith, ha centrado su atención en esta reunión.
La reunión tuvo lugar en julio de 2021 en el club de golf de Trump en Bedminster, Nueva Jersey, con la presencia de dos personas que trabajaban en la autobiografía del exsecretario general de Trump, Mark Meadows, y otros asesores del expresidente. Según las fuentes, ninguno de los asistentes tenía autorización de seguridad para acceder a información clasificada. Se informa que el documento mencionado por Trump en la reunión no fue elaborado por Milley, a pesar de que Trump lo atribuyó a él en la grabación.
Esta revelación de que Trump fue grabado discutiendo un documento clasificado puede aumentar su exposición legal mientras busca postularse nuevamente para la Casa Blanca. Aunque Trump ha negado cualquier delito, esta situación plantea interrogantes sobre por qué insiste en que estaba negociando la entrega de documentos clasificados.
La investigación del fiscal especial Smith se acerca a su fin, pero hasta ahora no ha resultado en ningún cargo penal. La grabación en manos de los fiscales muestra que están analizando tanto los documentos clasificados recuperados de Mar-a-Lago como lo sucedido en Bedminster. En esa reunión, Trump discutió el documento sobre Irán y expresó su deseo de socavar lo que Milley estaba diciendo.
Las explicaciones dadas por Trump y sus abogados sobre los documentos desclasificados han sido diversas y a menudo contradictorias. Inicialmente, sus aliados afirmaron que tenía una «orden permanente de desclasificación», lo que implicaba que los documentos retirados del Despacho Oval se desclasificaban automáticamente. Luego, Trump afirmó que podía desclasificar cosas «solo con pensarlo». Recientemente, afirmó que los materiales se «desclasificaron automáticamente» cuando los tomó. Sin embargo, no hay pruebas de que Trump haya seguido el proceso legal de desclasificación y sus abogados no han afirmado en los tribunales si efectivamente desclasificó los registros que tenía en su poder.
Esta grabación socava su argumento de haber desclasificado todos los documentos en su poder y plantea interrogantes sobre su insistencia en negociar la entrega de documentos clasificados.