Miles de franceses participaron en una «huelga intersectorial» para pedir el aumento de salarios, pensiones y mejores subsidios sociales.
Redacción Perspectiva
La huelga inició a finales de septiembre con los trabajadores de las refinerías francesas y que han ocasionado la escasez de combustible en gasolineras.
Este martes se unieron a la huelga otros sectores que reclaman incrementos salariales ante el aumento de los precios y la crisis energética.
Los sindicatos más importantes miembros de la Confederación General del Trabajo (CGT) en los que se encuentran trabajadores del transporte público, la sanidad o la educación.
Este martes 18 de septiembre se realiza la primera huelga general durante el gobierno de Macron. Bajo la consigna de mejores salarios, pensiones y de los subsidios sociales, así como “mejorar de las condiciones de vida y de estudios.» Se han convocado unas 140 manifestaciones en todo el país.
Por su parte, el gobierno francés asegura que de ser necesario se reclamará de nuevo personal para garantizar el funcionamientos de las refinerías ante el parón por las huelgas. Además, habrán intervenciones «como sea necesario» para satisfacer las necesidades de los franceses.
Según el gobierno, «no le corresponde al Gobierno asumir el diálogo social en una empresa privada».