La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado recientemente que el brote de viruela del mono, también conocido como «mpox», ya no representa una emergencia sanitaria mundial.
Redacción Perspectiva
Esta decisión se produce después de que la OMS declarara a la viruela del mono como una emergencia de salud pública de importancia internacional en julio de 2022. En ese momento, se consideró que el brote era un «evento extraordinario» que representaba un «riesgo para la salud pública de otros Estados a través de la propagación internacional de la enfermedad», y que podía requerir «una respuesta internacional coordinada».
Una emergencia de salud pública de importancia internacional (PHEIC, por sus siglas en inglés) crea un acuerdo entre los países para acatar las recomendaciones de la OMS y gestionar la emergencia.
A su vez, cada país declara su propia emergencia de salud pública, que tiene peso jurídico. Los países las utilizan para reunir recursos y renunciar a normas con el fin de aliviar una crisis. Sin embargo, tras una reunión esta semana, el Comité de Emergencia de la OMS para la viruela del mono recomendó terminar la medida, y el director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, se mostró de acuerdo con esta decisión.
Tedros destacó que aunque la viruela del mono ya no representa una emergencia sanitaria mundial, sigue siendo un importante problema de salud pública que requiere una respuesta sólida, proactiva y sostenible.
En lo que va de 2022 hasta abril de 2023, se han notificado más de 87 mil casos confirmados de viruela del mono, incluyendo 140 muertes, procedentes de 111 países o territorios. Estados Unidos ha notificado más de 30 mil casos, pero los casos han disminuido durante los últimos meses, especialmente a medida que ha aumentado la conciencia sobre la enfermedad y se ha generalizado la disponibilidad de una vacuna.
Aunque el número de casos ha disminuido, la transmisión sigue circulando y existe una incertidumbre comprensible sobre la probabilidad de un gran resurgimiento de la infección. También hay vacíos en los conocimientos, que incluyen los modos de transmisión en algunos países, la eficacia de las vacunas y la continua falta de contramedidas eficaces, en particular en los países africanos, donde la transmisión y los casos de viruela del mono se producen con regularidad.
El comité decidió suspender la emergencia de salud pública después de intensas deliberaciones y debates, pero determinó que la mejor forma de resolver los problemas era mediante un enfoque a largo plazo y no con medidas de emergencia.
La viruela del mono es un pariente menos grave del virus de la viruela, que ya se ha erradicado. Es endémico en algunas zonas de África Occidental y Central y suele contraerse de un roedor o un pequeño mamífero.
En el reciente brote, los homosexuales y bisexuales han constituido la mayoría de los casos, aunque cualquier persona que tenga un contacto personal estrecho con alguien contagiado está en riesgo.
Aunque el estigma ha sido una de las principales preocupaciones en la gestión de esta epidemia y sigue dificultando el acceso a la atención de la viruela símica, la temida reacción violenta contra las comunidades más afectadas no se ha materializado en gran medida
