“Normas nuevas, caras conocidas” parece ser la frase que define el próximo proceso electoral. Para comprender las dinámicas detrás de este fenómeno, Perspectiva consultó con cuatro analistas políticos, quienes expusieron sus diversos puntos de vista sobre el panorama preelectoral, con varios desafíos para organizaciones que mantienen prácticas tradicionales como el clientelismo y el verticalismo, en un contexto en el cual la institucionalidad del Estado se encuentra en jaque.
Al cierre de esta edición se conoció que el TSE denegó la inscripción al binomio integrado por Zury Ríos y Roberto Molina Barreto.
Roxana Orantes Córdova
De las 27 organizaciones políticas que participarán en el proceso electoral, doce han presentado a sus binomios. La mayor parte de los postulados son ex funcionarios, ex diputados o candidatos que ya han participado en otros procesos.
“Lo idóneo no hubiera sido la participación de nuevos personajes, sino la renovación de las antiguas prácticas”, dijo el analista independiente Adrián Zapata, quien recordó: “Hace cuatro años los guatemaltecos apostaron a un outsider y los resultados son evidentes”.
Para José Carlos Sanabria, de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES), “no solo se trata de caras, es importante que existan propuestas renovadoras, más allá de los símbolos, colores y caras”.
El catedrático de Ciencia Política Edmundo Urrutia, explicó que el telón de fondo para este proceso electoral es la crisis derivada de las contradicciones entre el Ejecutivo y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), que involucra a los tres poderes del Estado.
Finalmente, la analista de ASIES Celia Luna, recordó que las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos (LEPP) que regirán el proceso, no incluyen las propuestas realmente novedosas que surgieron durante la discusión de dichas reformas. “Los partidos representados en el Congreso aprobaron estas reformas, cerrándose para no permitir opciones que hubieran podido oxigenar el sistema”, dijo.
“Las propuestas nuevas importan más que las caras nuevas”
Zapata enfatizó en la necesidad de relegitimar la política, y agregó: “con la dinámica actual no se va a legitimar la política. No se trata de que participen personajes sin experiencia, sino de que los partidos modifiquen la dinámica del ejercicio político, que podría seguir subordinada al poder económico o al judicial. Evidentemente, esto no significa que no esté subordinada a la justicia, sino terminar con la judicialización de la política”.
El binomio oficialista es ilustrativo sobre la permanencia de las viejas prácticas, dijo Zapata, quien señaló que: “el proceso no va a aportar soluciones mágica. Lo más a lo que podemos aspirar es que el proceso se centrara en los planteamientos programáticos más que en la reiteración de viejos rostros que solamente ofrecen discursos”.
Según dice, el TSE puede jugar un rol muy importante en la difusión de programas e ideologías, más que en caras y discursos.
“Nuevas normas con los mismos actores”
“Lo que sucede es que la oferta electoral no renovó a los actores. No se perfilan nuevos candidatos. Como sociedad, nos queda de aprendizaje que los partidos deben prepararse con anticipación ante los comicios, para que puedan presentar propuestas renovadoras a los votantes, más allá de los símbolos, colores y caras”, dijo Sanabria.
Pese a lo breve que será la campaña electoral de este año, el politólogo considera que los partidos tienen tiempo suficiente para presentar sus plataformas programáticas e ideológicas. “Hay que esperar que tengan la capacidad de hacerlo. Esta es una elección favorable para la presentación de propuestas renovadas e ideas frescas. Las organizaciones políticas pueden aprovechar que existe cansancio de la ciudadanía hacia lo mismo, y esto puede favorecer su desempeño electoral, innovando e implementando nuevas estrategias”, expresó.
“La caballada está flaca”
Edmundo Urrutia señaló que la polarización será el telón de fondo para este proceso electoral. “Esta polarización contribuye a profundizar el deterioro institucional. Llama la atención la excesiva fragmentación de los partidos conservadores, pero también de los grupos que representan a las organizaciones populares. Pareciera una estrategia donde cada uno apostara a medirse por su lado”.
“Me parece extraño que entre los candidatos se ven algunas caras nuevas que carecen de trayectoria, sin perfil de estadistas. En México se decía “la caballada está flaca” y esto es lo que sucede actualmente. No se vislumbran opciones que generen entusiasmo, aunque objetivamente, Sandra Torres y Thelma Aldana son dos figuras que podrían imponerse”.
Según Urrutia, Aldana “está esperando el momento oportuno para salir como candidata”. Consultado sobre diversos casos de corrupción que involucran a la ex fiscal, como el “edificio fantasma” y la contratación de un lobista en Estados Unidos, financiado por el MP, Urrutia reconoció que estos aspectos podrían hacer vulnerable a la ex Fiscal y usados como parte de la estrategia de quienes la objetan, aunque concluyó:
“En el escenario hay dos fuerzas. Los conservadores, quienes abogan por preservar el régimen y el statu quo imperantes, y quienes están a favor de las reformas al Estado, los críticos del régimen llamados “pro CICIG”, quienes no tienen un candidato fuerte y cuya única posibilidad es Thelma Aldana. A pesar de sus relativas vulnerabilidades, es una figura surgida a partir de la ola ciudadana de 2015”.
Reformas que mantienen vigente la “vieja política”
La politóloga Celia Luna consideró que es importante recordar que las reformas a la LEPP no fueron profundas. “No se tomaron en cuenta aspectos como los desagregados territoriales, que se habían planteado, tanto desde ASIES como desde otros grupos. Uno de los objetivos era que las organizaciones políticas pudieran plantearse desde tres niveles: municipal, departamental y nacional. Esto hubiera permitido incentivar la participación desde los tres niveles y con ello, la participación de nuevas personas”, señaló.
Además, esta modalidad permitiría la integración de partidos políticos locales, sin participación a nivel nacional, lo que daría lugar a que grupos de ciudadanos de determinada región pudieran impulsar sus propios alcaldes o diputados, sin necesidad de contar con la estructura partidaria que requiere la ley vigente, dijo.
Por ejemplo, el Partido Unionista (PU), con fuerte arraigo en la alcaldía metropolitana y que generalmente no obtiene resultados arrolladores a nivel del Ejecutivo ni Legislativo, podría competir únicamente por la alcaldía. O por la alcaldía y el Congreso, sin necesidad de trabajar en el complicado montaje de una estructura a nivel nacional, explicó.
El que no se modificaran estos y otros aspectos de la LEPP, “permitió que se vean las mismas caras con otros vehículos electorales. Diversos ex magistrados, ex diputados y personajes que han participado como candidatos a puestos de elección vuelven a competir. Son los mismos que aprobaron la reforma a la LEPP. Se habla de una reforma de segunda generación a esta ley, que permitiría entre otros, modificar el sistema de listados para elegir diputados”, comentó.
Sumado a lo anterior, mencionó la falta de liderazgos y la escasa participación. “Los partidos carecen de mecanismos para formar a sus bases y esto incide en la falta de liderazgos. Hace falta una cultura de meritocracia, que permita la oxigenación de los liderazgos políticos. Muchos partidos participan en una sola elección y luego desaparecen para reaparecer con otras siglas. Y el resultado siempre es el mismo”, concluyó.
Binomios presentados hasta el momento
Doce organizaciones políticas han presentado sus binomios, aunque una de ellas, Prosperidad Ciudadana (PC), anunció que inscribirá a sus candidatos en febrero. Los binomios definidos en las asambleas, más los del PC ya presentados como candidatos virtuales, están integrados por los siguientes candidatos. A continuación, los binomios en orden alfabético:
- Convergencia: Benito Morales y Claudia Valiente
- FCN Nación: Estuardo Galdámez, Betty Marroquín
- FUERZA: Mauricio Radford y Manuel Abundio Maldonado
- PC: Edwin Escobar y Blanca Alfaro
- PU: Pablo Manuel Duarte Sáenz de Tejada y Julio Roberto del Socorro Villeda
- TODOS: Fredy Cabrerra y Ricardo Sagastume
- UCN: Mario Estrada y Javier Castillo
- UNE: Sandra Torres y Carlos Morales
- VAMOS: Alejandro Giammattei y Guillermo Castillo
- VIVA: Juan Carlos Eggenberger y Antonio Rodríguez
- Valor: Zury Ríos y Roberto Molina Barreto
- Winaq: Manuel Villacorta y Lilian Izabel Hernández