El PDH, Jordán Rodas calificó de apresurada y “altamente riesgosa para la vida y la salud de la población” la decisión del Gobierno de iniciar la reapertura de actividades económicas y sociales. Rodas, advierte que esto puede provocar un aumento desmedido de casos de COVID-19 en todo el país.
Redacción Perspectiva
De acuerdo al Procurador de los Derechos Humanos (PDH), Jordán Rodas la decisión del presidente Alejandro Giammattei y autoridades de Salud de reanudar las actividades comerciales, sociales y religiosas se sustenta en una estrategia débil que pone en riesgo la salud de la población.
Además, Rodas indica que el sistema de información para el registro de casos de COVID-19 es de dudosa fiabilidad y la cantidad de pruebas es insuficiente para establecer la cantidad real de personas contagiadas en cada localidad del país.
Asimismo, el PDH considera que el Gobierno no preparó la “acelerada reapertura con responsabilidad y el profesionalismo que la crisis exige”. Por otro lado, el magistrado de conciencia indicó que ha observado una precaria comunicación y descoordinación del gobierno central con los gobiernos municipales.
Rodas considera que “la decisión gubernamental se puede calificar como precipitada y altamente riesgosa para la vida y la salud de la población, y de la propia economía.
Por tanto, el magistrado de conciencia recomienda al presidente Alejandro Giammattei y a las autoridades del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) revisen las decisiones asumidas y promuevan una reapertura pausada que permita un proceso seguro para la población.