Una iniciativa germano-rusa permite rastrear desde la estación espacial ISS a especies enteras de animales en todo el mundo para observar sus migraciones, prevenir fenómenos naturales e incluso pandemias, señaló hoy el director del proyecto, Martin Wikelski.
Por DPA
El experto de la Universidad de Constanza se mostró satisfecho de los resultados cuando se cumple un año del inicio de la misión «Icarus» (siglas de International Cooperation for Animal Research Using Space, Cooperación Internacional para la Investigación Animal desde el Espacio).
Está funcionando mucho mejor de lo que se esperaba, dijo Wikelski. «El sistema no se había probado realmente antes y ahora podemos ver que funciona en el espacio».
Tras algunas dificultades iniciales para transmitir los datos, los problemas se solucionaron. Sólo en raras ocasiones hay incidencias, como en el periodo de junio a julio de este año, debido al acoplamiento de un módulo a la estación espacial ISS, al que está unida la antena receptora del equipo del proyecto, añadió.
El sistema permite rastrear especies enteras como las de los cucos y los charranes árticos mediante microsensores que fueron colocados en miles de animales. Hasta ahora, los participantes en el proyecto germano-ruso utilizan la transmisión de datos al espacio para 103 proyectos de investigación individuales en 91 lugares del mundo, aunque la mayoría están en Europa.
La operación científica del proyecto comenzó el 10 de septiembre de 2020 y en un próximo paso el objetivo es hacer los transmisores aún más pequeños y ligeros y que sean capaces de hacer cálculos sencillos por sí mismos, de modo de que sea menor la cantidad de datos que se transmitan.
Wikelski ve un gran potencial no sólo para estudiar el comportamiento migratorio de las aves. Por ejemplo, las mediciones de los buitres en el Himalaya podrían utilizarse para generar datos meteorológicos donde ninguna sonda meteorológica podría llegar, explicó.
Los microtransmisores también podrían ayudar a analizar los movimientos de los animales en la lucha contra los cazadores furtivos o a predecir las erupciones volcánicas.
La vigilancia de los animales con «Icarus» también podría ser útil incluso para prevenir otra pandemia. El proyecto puede proporcionar información sobre los movimientos de los animales y, por tanto, también sobre la transmisión de patógenos a los seres humanos.
Participan en el proyecto, entre otros, la agencia espacial rusa Roskosmos y el Centro Aeroespacial Alemán (DLR).