El expresidente Donald Trump le pidió formalmente a la Corte Suprema de Estados Unidos que revoque el fallo del máximo tribunal de Colorado que lo retiró de la boleta electoral del estado para 2024, en virtud de la “cláusula de insurrección” de la Enmienda 14, según fuentes familiarizadas con el asunto, esto, luego que también accionara en Maine, estado en donde también se le ha prohibido figurar en la papeleta electoral.
Redacción Perspectiva
El expresidente y ahora candidato tenía de plazo hasta este jueves 4 de enero para acudir al Supremo, que cuenta con una super mayoría conservadora de seis jueces, tres de ellos nombrados por el propio Trump durante su presidencia, según destacaron medios locales.
El recurso se suma a otro presentado por el Partido Republicano de Colorado. Llega además al día siguiente de otro presentado por Trump ante el Tribunal Superior de Maine contra su exclusión en las primarias de dicho estado. En ambos Estados las primarias se celebran el próximo 5 de marzo, el conocido como Supermartes, la fecha en que se eligen más de un tercio de los delegados que designarán al candidato presidencial republicano.
Maine le prohibió a Trump estar en la boleta de las elecciones primarias presidenciales debido a su papel en el ataque del 6 de enero de 2021 contra el Capitolio federal. Se trató de una decisión de la secretaria de Estado Shenna Bellows.
La funcionaria justificó su decisión, tomada a solicitud de residentes y exlegisladores, por considerar que el papel de Trump en el ataque al Capitolio de Estados Unidos violaba la Sección 3 de la 14ª Enmienda, que prohíbe ocupar cargos públicos a quienes “participan en una insurrección”.
En este sentido, la apelación de Trump ante la Corte Suprema de Maine argumentó que Bellows no tenía jurisdicción en el asunto y pide que se le exija incluir a Trump en la boleta primaria del 5 de marzo. La apelación sostiene que abusó de su discreción y se basó en “pruebas no confiables”.
A más de tres años después de perder su intento de reelección, el exmandatario enfrenta una serie de obstáculos para recuperar la Casa Blanca, sobre los que el tribunal más alto del país, de nueve miembros, podría tener la última palabra, ya sea en detrimento o beneficio de Trump.